I'm back.

Ya me estaba colgando demasiado y las peticiones para que Estrenando Soltería volviera eran tantas y tan sinceras que no he tenido otro remedio que volver a abrir el chiringuito.

No he escrito antes porque este mes de septiembre estoy sufriendo depresión post-vacacional, que aún me dura y que espero que pronto se me pase. Estos días con las fiestas de la Mercè, que para mi marcan claramente el final del verano, puede ser que me recupere o que caiga aún más fondo, ya os diré.
El verano ha ido bien, ha sido divertido y variado. Me he pasado todo el verano jugando a voley con gente muy entregada. De ahí saqué a mi único ligue del verano: Gucci, un argentino gigoló, guapo y tonto, como a mí me gustan, que pasó de mí después de la segunda cita. Hablando de guapos y tontos, me encontré con mi ex después de año y medio y ya no es guapo, pero sigue tonto, más si cabe.
También he estado en lo del fútbol con los alemanes, en la Costa Brava con Chia, en Oporto con Mel, en la boda de Ces y al final en Menorca, superando en días e intensidad mis cinco estancias anteriores. He salido lo justo, he trabajado a medio gas, he recibido visitas, he cuidado a mi sobrina, he acabo la cuarta de Lost, he leído libros que no me han marcado y me he enganchado al Facebook.
El viernes que viene me voy al Camino de Santiago, esta vez caminaremos de Frómista a Ponferrada. Me acabo de dar cuenta que mi blog podría ser un corta y pega del año pasado: propósitos del nuevo curso, Camino en otoño, líos con argentinos, fin de año en Madrid, Valencia en Fallas, Cabo de Gata en primavera, Menorca en verano, depresión post-vacacional.... ¡Qué aburrida! A ver si puedo sorprenderos un poco esta vez, aunque no prometo nada.